La masificación de Internet y el desarrollo tecnológico, llevaron a las empresas a iniciar una etapa de digitalización; en la que se busca reducir costos, optimizar el rendimiento de los procesos y adaptarse a los nuevos hábitos de consumo de los clientes. Los bancos, siempre atentos a la innovación y con alta capacidad de inversión, están migrando rápidamente a este modelo con la conocida como «banca digital».
Mucho más que automatización
La posibilidad de realizar operaciones a través de una aplicación móvil o desde un computador es solo la punta del iceberg. La banca digital va más allá. Hace referencia a la implementación de tecnologías de vanguardia, con el Internet a la cabeza, que buscan ampliar la inclusión financiera, reducir los costos de los servicios, aumentar el portafolio de trámites bancarios digitales, y garantizar la seguridad de las transacciones.
Por otra parte, pretende llegar al punto en que la relación con los asesores comerciales pueda realizarse de manera segura en espacios virtuales intuitivos y amenos. De hecho, en un corto plazo las instalaciones físicas de los bancos dejarán de ser centros administrativos, para convertirse en puntos donde solo se lleven a cabo trámites de alto valor.
Retos en materia de seguridad
En una entrevista, Erika Ovalle -oficial de seguridad de la información del Banco Internacional- especifica los principales desafíos a los que debe enfrentarse la banca digital:
- Proteger los datos bancarios de los usuarios.
- Adaptar el software a las necesidades del mercado, sin dejar de garantizar la seguridad.
La capacitación de clientes sobre prácticas seguras en los entornos financieros digitales, es una prioridad. Es sabido que los delincuentes informáticos aprovechan la ingenuidad o ignorancia de los usuarios para robar sus datos bancarios, siendo los métodos más utilizados:
- El envío de correos con direcciones que derivan a un sitio de phishing.
- Modificando el archivo host y redireccionando a sitios de phishing.
- La contaminación mediante virus troyanos con la finalidad de robar contraseñas.
Y sigue creciendo…
La digitalización bancaria es un fenómeno que crece a diario. De hecho, las cifras del BBVA lo reflejan. Mientras que en el 2006 se registraron 90 millones de operaciones diarias, en el 2016 la cifra alcanzó los 542 millones, y el banco se prepara para afrontar en el 2017 cerca de 1.000 millones.
