Pionero en el desarrollo de las tecnologías en Chile, el académico de la Universidad de Chile, José Miguel Piquer, no sólo ha trabajado en su progreso, sino que también en cómo transformarlas en un aporte para el avance de la democracia digital de país con el fin de entregar un mayor dinamismo y participación ciudadana.
En el último tiempo Chile ha dado pasos importantes en el desarrollo de la tecnología. Hoy son muchas las actividades y trámites que podemos realizar a través de Internet, incluyendo la posibilidad de realizar votaciones en línea, no solo para elegir a nuestros representantes en el Gobierno, el parlamento o los sindicatos, sino que también para decidir sobre asuntos que afecten la vida cotidiana de la ciudadanía.
Sobre estos temas y el desarrollo de la democracia digital en nuestro país conversamos con el académico de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile y contacto técnico de NIC Chile, José Miguel Piquer, pionero en el desarrollo de Internet, autor del dominio “.cl” y actual Premio Nacional de Telecomunicaciones 2015, quien nos entregó su visión sobre la importancia de la tecnología en los procesos de modernización de la democracia en el país.
¿Qué es democracia digital?
En general democracia digital es pensar qué cosas que forman parte de este proceso se podrían mejorar, implementando tecnología de la información y comunicación integral, con el objetivo de que esto pueda ayudar para que todo sea más rápido, cómodo y aumente la participación.
En la vida cotidiana la tecnología ya ha cambiado radicalmente varias cosas, pero la democracia aún se mantiene en un esquema un poco más conservador y con problemas graves de participación. El aporte de la tecnología y las comunicaciones puede mejorar nuestra democracia, haciendo elecciones más rápidas y a un costo menor de lo que existe en la actualidad.
¿Cómo aporta la tecnología a la democracia?
La democracia se basa en elegir representantes a través de un sistema creado en una época en que el transporte y las comunicaciones eran distintos a lo que son en la actualidad, por eso si ese mismo modelo se trae al presente, se podría pensar que debería modernizarse con votaciones constantes y permanentes, pero no es lo que sucede.
El aporte que entrega la tecnología a la democracia es fundamental para su dinamismo. Los avances de la tecnología de la información y comunicación podrían revolucionar radicalmente en cómo se implementa la participación ciudadana. Esta podría ser más profunda e instantánea.
¿La democracia digital se implementa en el país?
En el área política es probablemente la última donde se incorpore la tecnología, porque debe existir una voluntad política para que esto ocurra y es un poco complicado agregar una tecnología nueva a algo que está más o menos funcionando.
El otro problema de la democracia en Chile es la participación y probablemente sería por la única razón porque la tecnología podría ser incorporada. Donde sí se aplica la participación electrónica es en los colegios profesionales y organizaciones sindicales, entre otros.
Para ellos las votaciones son muy importantes y estaban teniendo un problema de participación y quórum, que legalmente era complejo, y el sistema ha funcionado muy bien, ahora pueden acceder a votación a distancia. Esto no significa automatizar el proceso mismo en la sala, si no que ejercer su derecho a voto desde cualquier parte del mundo, utilizando el notebook o celular.
Los sindicatos de las mineras son los principales usuarios de este sistema debido a que trabajan en sistema de turno y es muy difícil realizar elecciones, ya que los resultados pueden demorar semanas, por eso poder votar a distancia agiliza este proceso.
¿Crees que el país está preparado para la implementación del voto electrónico?
Los votantes están preparados, lo adquirirán de inmediato y será súper efectivo. El problema está en nuestra clase política que no está muy bien preparada, existe mucha desconfianza en estos sistemas y tienen miedo a que voten personas que nunca han participado y que los resultados sean muy distintos a los que están acostumbrados. Creo que si se implementara, los votantes esterarían felices, porque tendrían una opción más fácil y cómoda para ellos.
¿Cómo ves el futuro de la democracia digital en Chile?
En todas partes del mundo este fenómeno va ocurriendo, tenemos algunos países que ya se vota electrónicamente, aunque exista alguna crítica sobre esto. Es clarísimo que es hacia allá donde vamos, en el fondo, podemos elegir unirnos un poco antes o un poco después, pero en la práctica es inevitable que la tecnología de la información y comunicación impacte a largo plazo y terminaremos votando de forma electrónica, porque de alguna forma las personas tendrán la necesidad de que esto sea más fácil y los dispositivos se mostrarán como la solución.
Lo que ocurrirá es que esta tecnología se comenzará a ocupar en otras elecciones, más pequeñas, como en las comunidades de edificios, sociedades anónimas, centro de padres, entre otras. En estos nichos la aplicación de la tecnología es más rápido, por eso cuando se comience a utilizar con más frecuencia, las personas lo comenzarán a exigir lo mismo para el sistema político.