Su gran pasión es la vida natural, vivir y estar en constante contacto con la naturaleza, por eso, Claudio Quintana disfruta mucho de las actividades outdoors. Se declara aventurero y amante de la adrenalina, cosas que lo hacen sentir más vivo que nunca y le permiten encontrarse consigo mismo.
Nació en Talca, pero con solo tres años de vida sus padres decidieron trasladarse a Venezuela donde permanecieron durante 15 años. Luego de esto, emigraron a España donde vivieron durante otros tres años más. Sin embargo, como dicen que “la tierra llama”, su familia retornó definitivamente a Chile.
Tras una serie de trámites, logró convalidar cursos y terminar como corresponde la enseñanza media para luego poder ingresar a la Universidad del Biobío, sede Chillán, donde estudió Ingeniería de Ejecución en Computación e Informática. Ahí conoció a su esposa, con quien tiene dos hijas y además de 16 animales, entre perros gatos y pájaros, conformando una bella familia. En la Universidad también conoció el andinismo, deporte por el cual realmente se apasiona.
Si bien durante su paso por la Universidad el andinismo y las actividades outdoors comenzaron a formar parte de su vida de una manera más destacada, esta pasión comenzó cuando Claudio realizaba campamentos junto a amigos y familiares cuando solo tenía 10 años de edad, donde se dio cuenta que disfrutaba el contacto con la naturaleza, los animales y el paisaje cordillerano.
“Mi pasión se estableció en mi vida Universitaria, donde recorrí casi toda la cordillera de la VIII región y algunos sectores del Cajón del Maipo. Participé en campeonatos de escalada universitarios y abiertos nacionales. Fui parte de la construcción del muro de escalada en el gimnasio de la Universidad y organicé 2 campeonatos de Escalada Universitarios en nuestra sede. Escalé todas rutas de roca en las Termas de Chillan” comenta Claudio.
Hace 5 años que trabaja en Kibernum para BancoEstado en el área de Metodología, en donde se desempeña como especialista metodológico, encargado de realizar mejoras y asesorías a las distintas iniciativas, proveedores y usuarios de la metodología en general, lo que implica constantes reuniones multidisciplinarias con las diferentes áreas asociadas.
Cuando comenzó su vida laboral las actividades de escalada se vieron disminuidas, se estableció en Santiago y comenzó a entrenar en el extinto Climbing Planet y luego en el gimnasio El Muro. Luego se mudo a Rancagua, donde se hizo parte del Club de Andinismo de la ciudad, donde realizó cursos como instructor y también clases en Escuelas Deportivas Municipales a escolares entre 10 y 15 años, lo que lo hizo pensar seriamente en su destino profesional.
“La escalada es un gran desafío personal, donde buscas progresar en la vertical haciendo uso de habilidades técnicas, constancia y motivación por el logro de llegar al fin de la ruta. Son cualidades, que en el trabajo diario hay que realizar y con motivación todo se logra”.
El montañismo, destaca Claudio Quintana, entrega experiencias de trabajo en equipo, liderazgo, constancia, ser metódico y cuidadoso, seguridad en uno mismo y en tus compañeros. Lograr metas, la clave es la motivación que tenga el equipo donde todos son importantes.
