Ésta profesora de matemática y física de profesión, después de haber pasado por la educación, decidió hacer un giro en su carrera y cambiar de rubro llegando así al área comercial de Kibernum, lugar donde se siente muy contenta con la empresa, el entorno y sobretodo con las personas.
Sin embargo, esto no es todo en la vida de Lorena, hay algo que hace desde que tiene dos años y nunca ha dejado de hacerlo, ella lo considera un hobby, pero si se toma en cuenta que ha participado en varios congresos nacionales e internacionales se podría decir que es más que un simple pasatiempo. Se trata del canto.
“Todo nació desde que yo era muy pequeña, en la casa de mis padres. Mi papá tocaba la guitarra y yo cantaba con él. Lo que me hace muy feliz hasta ahora. En la medida que fui creciendo cantaba como solista, con mis hermanos, en conjuntos femeninos, mixtos, etc. Ahora, participo en una orquesta tocando corno” cuenta Lorena.
Sin embargo, no se trata de cualquier tipo de música, toda esta vocación ha estado ligada a su participación en la Iglesia Adventista del Séptimo Día, en ella ha participado toda su vida, como alumna, profesora y fiel seguidora, formando parte de distintas agrupaciones, viajando a congresos dentro y fuera de Chile para compartir su canto con los demás.
“Para mi, cuando una ora, habla con Dios, le contamos todas nuestras cosas, pero cuando canto, me la juego con todo ensayando y preparándolo particularmente para hacerle un regalo especial”, comenta Lorena, quien para hacerlo cada vez mejor se ha preparado con los mejores, tomando clases de canto con la profesora y cantante del teatro Municipal, Clarita Molina y de corno francés, su última aventura, con Jaime Ibáñez, primer cornista de la Orquesta Sinfónica de Chile.
“Lo más nuevo que he hecho es la participación en la orquesta de la Iglesia tocando el corno francés – instrumento de viento-metal que históricamente invocaba la idea de cazar, o en el barroco, representar nobleza, realeza o divinidad – me siento demasiado honrada con este instrumento, es muy potente, difícil y requiere de mucha práctica, pero es lindísimo, su sonido es muy especial”.
Pero eso no es todo, además, Lorena participa del conjunto vocal BCM, agrupación que graba las producciones adventistas para Latinoamérica en español, con temáticas para los jóvenes, la mujer, niños, entre otros, todas con un enfoque religioso Cristocéntrico.
En diciembre, le tocó compartir su talento con el equipo de Kibernum, la invitaron a cantar para las actividades de fin de año de la empresa, invitó a una amiga y presentaron la canción Noche de Paz, aprovechando el tiempo en vísperas de las celebraciones navideñas.